Un viaje inesperado
Publicado el 16 de junio de 2017 por
Leire
Edad del autor/a cuando hizo la obra (años): 10
Un día soleado de verano, Amanda y Federico, estaban en casa de Sofía, su amiga de siempre, jugando a una gymkhana con el objetivo de encontrar el móvil de Amanda. Al encontrarlo, fueron los tres a tomar un helado en la Plaza Mayor y a ver la Catedral, que es el quinto centenario de cuando se puso la primera piedra de la Catedral Nueva.
Sofía desapareció entre la multitud y no cogía el móvil. Llamaron a la policía pero no le encontraron. Le buscaron en todos lados; en Claires (ella es un poco “pija pero le aceptan), H&M, Zara, Séphora… Nada.
Mientras tanto, los padres de Sofía y los de Federico y Amanda estaban esperando y confusos, ellos no les habían dicho nada. Amanda y Federico son hermanos y se llevan bastante bien para tener 1 año de diferencia.
Amanda le envió un whatsapp:
Amanda: Sofi!!
Sofi: Ola
Amanda: Qaces?
Sofi: Nada
Amanda: Ven!!
Sofi: No, x?
Amanda: dnd sts?
Sofi: Ay!
…
(aquí escriben mal porque así se escribe por whatsapp ¡!Qué chuli la carcasa!!)
- ¡¡No viene!! – dijo Amanda
- ¿¿!Por qué!?? – dijo Federico
- ¡¡Ahhh!! – Gritaron los dos al unísono
Fueron a casa de Sofía con todas sus esperanzas perdidas cuando de repente… ¡¡Ella estaba allí!! Se probaba su ropa nueva y estuvo de compras en la desaparición. Ellos se enfadaron mucho pero hubo una cosa que les quitó el enfado, una sorpresa… ¡¡¡Había billetes para volar a París!!!
Destino: París :-)
Billete para: Amanda, Federico y Sofía.
En qué tiempo: Semana Santa
Precio total: 1.000€
Se fueron de vacaciones y fue genial. Lo raro fue que les dejaran ir solos, puesto que tienen 10, 11 y 12 años, pero ellos no se dieron cuenta de ese detalle y disfrutaron mucho. Vieron la Torre Eiffel y comieron deliciosas crêpes. Fue genial. También conocieron a Jean Luc, un francés muy amable, y a Mariê, su hermana, con mucho estilo.
Jean Luc es un nombre de diseñador que él lo es y su hermana también, pero son buenas personas y les caen bien, puesto que son de su edad. Allí fueron de compras y de visitas, ¡¡No querían irse nunca de allí!!
Cuando volvieron a casa estaban agotados pero, a pesar de todo eso, no pararon de hacer cosas; Sofía se probó toda su ropa e hizo uno de sus desfiles de moda de mentira; Amanda quería aprender a cocinar crêpes pero se le quemaban pero al final le salieron. Federico quería aprender a hablar francés, algo que se le hizo bastante difícil pero lo superó.
Y con una chica muy guapa y a la moda, una gran cocinera de crêpes y un español que habla francés divinamente,
FIN
Este texto ha sido visto 1712 veces